El exitoso tándem formado por el paleoantropólogo Juan Luis Arsuaga y el escritor Juan José Millás, que han publicado recientemente su última obra, 'La conciencia contada por un sapiens a un neandertal', han protagonizado el acto central de las conmemoraciones del 12 de octubre, organizadas por la Casa Museo de Unamuno, en el Paraninfo de la Universidad de Salamanca.
La elección no ha sido casualidad, pues ambos escritores se declaran unamunianos. Millás dice empatizar con la novela 'San Manuel Bueno, mártir' ("Me impresiona mucho la idea de alguien que es mejor cuando deja de creer"), mientras que Arsuaga comparte la "pena unamuniana, como todos los de Bilbao" y reconoce su obsesión por la poesía del escritor: "Está hecha a golpes de cincel".
La admiración del paleoantropólogo es tal que defiende que "todos los rectores se deberían de parecer a él", recordando la época en la que el autor de 'Niebla' dirigió la Universidad de Salamanca, de la que destaca su grandeza. "Nos empequeñece a todos. Una señora me decía que creía que era más alto. Ha sido una buena cura de humildad", mantiene, haciendo gala de su humor.
Al ser preguntados por qué consejos les darían los estudiantes, Arsuaga, como científico, les recomienda que no se crean nada y que se hagan preguntas tontas: "Son las más difíciles de contestar". También que sean conscientes de que los "años universitarios son los mejores de nuestra vida y hay que exprimirlos. Hay que estudiar, trabajar, hacer todo tipo de actividades, enamorarse, discutir, hacer política, convivir...". Todo ello sin olvidar que a la universidad se accede con numerosas dudas y pocas certezas: "Somos ignorantes y por eso estamos aquí". "Salirse del corsé que impone el mundo académico", apostilla su compañero.
Abordaje de la naturaleza humana
Los escritores han alcanzado el éxito con su famosa trilogía, que "supone un esfuerzo considerable por unir algo", señala Millás. El fruto de ese sacrificio no ha 'calado' del todo bien en todos los ámbitos. "Hemos hecho un intento meritorio por cruzar la calle, por encontrarnos. A veces con muchas tensiones y desencuentros. El mundo académico nos mira con recelo, como si hubiéramos hecho algo menor".
Sus obras abordan la naturaleza humana, que se encuentra "en lugares tan variados como un sex shop o una clase de pilates". "Hemos viajado para conocernos a nosotros mismos. No lo hubiéramos podido hacer en nuestro despacho", afirma Arsuaga. "Los libros resultan muy novelescos. Tratan de cómo se relacionan personajes con intereses tan diferentes y cómo se van trazando asuntos de carácter científico, entre otros", añade Millás.
La subjetividad es uno de los elementos abordados en 'La conciencia contada por un sapiens a un neandertal'. Si enviáramos una nave a Marte que fuera capaz de hacer todo lo que hacemos humanos, ¿vendría bien añadirle subjetividad, que se quejara de que hace frío? Esta es la cuestión que se plantea Arsuaga y que responde negativamente. Aún así, le genera "una crisis existencial", según su compañero, que le lleva a visitar la catedral de Burgos para "ver a Dios".
"La inteligencia artificial te genera estas preguntas. La mente es un lugar donde se toman las decisiones. No hay ningún filósofo que esté más de actualidad que Descartes", concluye Arsuaga.