Dolor e indignación. Ese es el sentimiento de los familiares de J.M.R.C. que murió a consecuencia de los disparos que efectuó E.D.Y., más conocido como el pistolero de Garrido, en agosto de 2021.
En la entrada a la Audiencia Provincial, donde ha comenzado este martes el juicio, la hermana del fallecido, María Teresa Rozas, pedía justicia y aseguraba que este proceso “ha sido muy duro para nosotros, muy duro, viendo cosas en la prensa que ni sabemos y nos caía de sopetón”. Además, Rozas aseguraba que “la Justicia debería ser implacable en estos casos, porque no es lógico ni normal que te disparen sin ton ni son, porque no hubo ni pelea ni nada” y añadía que espera que la condena sea dura. “Que le caiga todo, 40, 60 o hasta que se muera”, concluye.
El ‘pistolero de Garrido’ está siendo juzgado como presunto autor de los disparos que acabaron con la vida de un hombre y dejaron gravemente herida a una mujer en la calle Isaac Peral en agosto de 2021. Según ha podido saber SALAMANCA24HORAS, el Ministerio Fiscal solicita para E.D.Y una pena de 36 años de prisión y más de medio millón de euros como responsabilidad civil entre las dos víctimas.
En concreto, el hombre está acusado de un delito consumado de asesinato con alevosía para el que la Fiscalía, representada por D. Pedro Puente, solicita 22 años de cárcel y 7 años de libertad vigilada; un delito en grado de tentativa de asesinato con alevosía por el que el Ministerio Fiscal solicita 12 años de prisión, a los que se suman otros dos años por un delito de tenencia ilícita de armas. Además, el ministerio público reclama una responsabilidad civil de 394.000 euros para los familiares del fallecido y otros 172.000 euros para la mujer lesionada. Similares penas solicita la acusación particular, mientras que el abogado de la defensa pide la libre absolución del acusado.
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