Una mujer de iniciales M.J.L.G. ha aceptado una pena de un año de cárcel y tres de alejamiento, así como a indemnizar a la víctima en 2.100 euros, en un acuerdo previo al juicio, por un presunto delito de acoso, después de que se obsesionara con un hombre y tratara de ponerse en contacto con él en repetidas ocasiones, tanto a través del teléfono como enviándole correos electrónicos.
Según el escrito de calificación del Ministerio Fiscal, la mujer le remitió 36 correos electrónicos, le dejó 170 llamadas perdidas en su teléfono móvil y llegó a presentarse al menos en dos oportunidades en casa de la víctima, pese a que ella vivía en Madrid, aunque él no le abrió la puerta. Además, también le dejó una nota en el buzón.
Al momento de tener lugar los hechos, previamente ambos habían mantenido una breve relación sentimental que terminó cuando el hombre cortó en marzo de 2015. Sin embargo, ella no aceptó el fin de la relación y acosó a la víctima, al punto de que él tuvo que interponer la denuncia correspondiente.