‘Fuenla’, el vecino pedófilo de Topas que se enfrentaba a 162 años de cárcel y solo ha sido condenado a 15

Fue arrestado por hacerse pasar por una chica joven para engañar a menores y conseguir fotos y vídeos de carácter sexual a través de Instagram. Ha admitido ser autor de más de 40 delitos de corrupción de menores

Imagen de archivo del municipio de Topas | Las viviendas y vehículo que salen en la imagen no tiene relación con el acusado
Imagen de archivo del municipio de Topas | Las viviendas y vehículo que salen en la imagen no tiene relación con el acusado

Pocas conversaciones en el municipio de Topas no acaban durante estos días con algo de ‘Fuenla’. Ni los conocidos ni los amigos, que llevaban ya muchos días sin saber de él, podían imaginarse el motivo de su desaparición y la respuesta real a su “ya os enteraréis”. De hecho, se habla de consternación e incredulidad por todo lo relacionado con este joven de 34 años, que, sin vivir permanentemente en él, acudía con asiduidad al municipio y llegó a trabajar algún tiempo allí.

Muchos vecinos todavía no se lo creen, pero aquel joven de aspecto simpático, “de aquí de toda la vida”, que han visto crecer y con su 'banda' de amigos en cada una de las fiestas patronales, en realidad es un peligroso pedófilo cuya preferencia eran los vídeos y fotos de carácter sexual de niños preadolescentes de 10 a 12 años.

Fue arrestado por agentes de la Policía Nacional en una operación donde también detuvieron a otras 26 personas por tenencia, producción y distribución de pornografía infantil, pero ninguno de ellos le hacía sombra en sus delitos a este “peligroso depredador sexual”, catalogado así por la propia policía en el comunicado de prensa donde explicaban una operación que duró tres años.

De hecho, en ese momento la Policía Nacional atribuía a ‘Fuenla’ (Miguel Ángel F. C.) más de 100 delitos de ‘grooming’, un chantaje sexual a través de internet que este individuo habría perpetrado contra los menores de edad, principalmente, aunque también con víctimas mayores de 18 años.

Para conseguir las fotografías y los vídeos, ‘Fuenla’ creaba perfiles falsos en la red social Instagram, haciéndose pasar por una mujer joven. A partir de ahí sus tentáculos eran prácticamente incalculables y podía llegar a hablar con decenas de menores a la vez y tener un alcance de cientos de ellos.

No todos los menores contestaban o le enviaban el contenido que Miguel Ángel les demandaba, pero sí fueron muchas sus víctimas, tal y como detalló en 2023 el diario ABC en un reportaje sobre el caso, firmado por Carlos Hidalgo.

En este trabajo, titulado como “La doble vida del mayor agresor sexual de niños por internet: el vecino perfecto y joven empleado de Correos en Madrid”, se cuenta el proceso que llevó a cabo la Unidad Central de Ciberdelincuencia de la Policía Nacional para dar con este delincuente confeso.

 

Más de 8.000 archivos de contenido sexual de menores

Después de ser arrestado en 2023, el pasado 3 de febrero se ‘celebró’ la vista oral para determinar la culpabilidad de ‘Fuenla’ y la pena que le esperaba. Sin embargo, el motivo de ese ‘celebró’ puesto entre comillas, se debe a que el juicio fue exiguo, puesto que reconoció ser autor de más de 40 delitos de corrupción de menores tras llegar a un acuerdo para que la pena pasara de 162 años y 7 meses, que pedía Fiscalía, a solo 15 años entre rejas.

Solo quince años por una larga lista de delitos sexuales contra menores: un delito de difusión de material pornográfico infantil, 3 de utilización de menores para elaborar material pornográfico, 28 delitos por embaucamiento de menores de edad para conseguir contenido sexual y 10 delitos de exhibicionismo y provocación sexual.

Para llegar a esa repugnante lista de delitos, ‘Fuenla’ creo en 2020 una perfil falso de Instagram para contactar con menores de edad, muchos de ellos más pequeños de 16 años.

Se ganaba su confianza haciéndose pasar por una chica algo más mayor, para después entablar conversaciones de carácter sexual y conseguir su fin: que los preadolescentes y adolescentes acabaran enviando vídeos, fotografías o realizándole videollamadas de tinte sexual, que este acababa grabando finalmente con una aplicación.

 

Decenas de carpetas 'temáticas' y clasificadas con nombres de cada víctima

Miguel Ángel apareció en el radar de la Unidad Central de Ciberdelincuencia de la Policía Nacional, tal y como recogió ABC, cuando pudieron comprobar que este pedófilo confeso había descargado en su equipo 145 archivos de contenido sexual donde aparecían menores de edad.

Siete meses después, y siempre según esa investigación aportada por el diario ABC, compartió a través de la aplicación Emule archivos multimedia de menores en actitud sexual explícita.

Con esta información, en diciembre de 2020, los agentes procedieron a realizar un registro de la vivienda de Miguel Ángel, incautando un ordenador, dos discos duros y un teléfono.

En estos dispositivos encontraron más de 8.000 archivos de contenido sexual de menores, distribuidos en cientos de carpetas ‘temáticas’ y a su vez personalizadas por cada una de las víctimas. A mayores, había 1.016 fotos y vídeos de carácter sexual en la plataforma Instagram de un total de 109 usuarios de esta red.

Una larga lista de víctimas prácticamente en su totalidad de España, aunque también guardaba contenido de cuatro menores de Italia, Guatemala, México y Colombia.

Dos años después de su detención no ha sido hasta este inicio de 2025 cuando ha conocido su verdadera condena. Tiempo también en el que sus amigos, conocidos y muchos familiares viven estupefactos, puesto que hasta ahora no habían descubierto su verdadera cara y la razón por la que en el último mes "no se le ha vuelto a ver por el pueblo".

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