Un mes llevan los vecinos de Cantalpino sin poder consumir agua del grifo por presencia en el agua de metolacloro, un pesticida de uso agrícola, mientras que en Macotera una avería tras otra hace que los vecinos llevan casi dos meses con cortes en el suministro y que, en este momento, el depósito se esté abastecimiento gracias a camiones cisterna. En Ledesma, el metolacloro también ha dado positivo en el suministro y sus vecinos llevan unos días recogiendo agua en garrafas, algo que esperan solucionar en una semana mediante filtros de carbón. Esto, impide que los vecinos no puedan hacer el sencillo gesto de abrir el grifo y beber agua, sino que tengan que recogerla en garrafas de las cisternas habilitadas para ello. Y todo en vísperas de que comiencen a llegar los veraneantes, momento en el que en la mayoría de los pueblos se dispara el consumo de agua tanto para beber, como para el mantenimiento de jardines o el llenado de piscinas. Un hecho que hará que estos problemas, si no se solucionan antes, se multipliquen.
Hasta la fecha, la Diputación de Salamanca ha repartido más de un millón de litros de agua entre once municipios de la provincia de Salamanca. Ninguno de ellos ha sido por sequía, ese problema comenzará con la llegada de las altas temperaturas y, previsiblemente, hará que esa cifra se dispare. Todos han sido por averías, por contaminación o problemas de calidad del agua.
Macotera es con diferencia el municipio que más litros ha recibido vía cisternas. En concreto ha consumido 656.000 litros de agua. Desde el mes de abril la localidad de la comarca de Peñaranda tiene problemas con el abastecimiento por diversas averías. Esto ha hecho que el suministro de agua se haya dado con cortes continuos, que en algunos días han supuesto que los vecinos solo hayan tenido agua en sus viviendas una y dos horas. Algo que ha llevado al límite a la población de la localidad que se pregunta qué ocurrirá cuando las numerosas casas que todavía están cerradas en el pueblo se llenen de veraneantes.
Otro de los municipios que llevan más tiempo sin poder consumir el agua del grifo es Cantalpino. La presencia en el agua de metolacloro, un fertilizante utilizado en la agricultura, hace que desde hace más de un mes los vecinos de la localidad no puedan beber el agua y tengan que recurrir a la suministrada por cisternas. Un problema “puntual” según el Ayuntamiento debido al abuso de esta sustancia en la agricultura y que esperan solucionar cuanto antes ya que están esperando la confirmación por parte de Aqualia de que la red está libre de esta sustancia, algo que según el Ayuntamiento es así según los análisis que ha encargado a una empresa salmantina. Sin embargo, la confirmación oficial hace que el agua siga siendo no apta para consumo. Cantalpino ha recibido solo 8.000 litros de agua en cisternas de la Diputación.
La misma sustancia ha aparecido en la red de agua de Ledesma. La villa capta el agua desde el río Tormes y el metolacloro ha sido detectado en niveles más altos que los permitidos. Desde hace unos días los vecinos reciben suministro de agua a través de cisternas. Para solucionar el problema, el Ayuntamiento ha instalado filtros de carbón activo que evitarán este problema en el futuro. Hasta que se realicen nuevos análisis del agua, el consumo sigue prohibido en el municipio.
En cuanto a los municipios que han recibido agua de la Diputación a través de cisternas, tras Macotera está Trabanca, que por una avería consumió 189.000 litros, seguido de Peñarandilla por las mismas causas con 135.000 litros de agua suministrados.