El Ayuntamiento de Cantaracillo ha alertado a sus vecinos de que no consuman el agua del grifo ya que en la última analítica se ha encontrado una alta concentración de arsénico. De hecho, los niveles se sitúan en 12 UG/L cuando el máximo permitido es 10. El Ayuntamiento, en un bando emitido, asegura que estos niveles “se estiman circunstanciales y transitorios”, pero que han “obligado al Ayuntamiento a tomar las medidas necesarias para salvaguardar la salud de los consumidores”.
Para dar solución a los vecinos mientras se soluciona el problema, el Ayuntamiento ha puesto a su disposición agua embotellada para beber y cocinar. De hecho, ya la están recogiendo en la biblioteca del Ayuntamiento, aunque tan sólo se entrega una garrafa por vecino. El horario para recoger el agua es de 9.30 a 11.00 todos los días.