La villa de Ledesma continúa con sus celebraciones festivas tras la intensa apertura de los festejos con el pregón y la coronación de la reina y damas. El jueves, como era tradición antiguamente, en la villa mantienen la procesión del Corpus. Una celebración llena de tradición y boato que permite sacar a la calle el impresionante patrimonio artístico y religioso de la villa.
La comitiva ha recorrido las principales calles del casco antiguo parando en los numerosos altares que son montados por los vecinos. Un recorrido plagado de tomillo e incienso que ha estado acompañado por los tamborileros de la villa y un gran público, presente en todo el recorrido junto a los niños de la Primera Comunión y las damas del Corpus.
Para esta tarde está previsto que los más pequeños disfruten de un parque infantil con hinchables y atracciones y esta noche serán las pandas de la localidad las que tengan su cena tradicional con una parrillada.