En los últimos meses, Salamanca ha vivido días en los que el agua ha protagonizado la mayoría de los días, algo que se ha visto agraciado en forma de acumulación en los embalses, situando a la provincia por encima del 50 por ciento.
Como dato positivo, además, Castilla y León y el norte de España han sido las principales beneficiadas de estos sucesos, algo que en el resto de la península no se ha podido dar que ponen en alerta de cara al verano a las demás regiones del estado español.
Donde más se han llenado los embalses ha sido en el oeste de Salamanca, alcanzó en una semana un milímetro de acumulación. Con respecto a lo almacenado en toda la provincia en los tres últimos meses ha sido: en el sur entre 400 y 500 milímetros de agua, en el oeste entre 300 y 400 milímetros, en el este de 200 a 250 milímetros y en el norte de 120 a 200 milímetros.
Del mismo modo, en la última semana se ha acumulado el agua de las lluvias gracias, en parte, a las nieblas, ya que las precipitaciones han brillado por su ausencia, pero como noticia en la que hacer hincapié, los valores se han situado por encima del periodo que abarca desde 1991 hasta el 2020.