No tienen equipos de protección suficientes, incluso comparten los EPIS, no hay formación específica tras aprobar la oposición, faltan recursos materiales, hay vehículos no homologados o sin Inspección Técnica de Vehículos, no hay oficiales, ni técnicos, ni suboficiales, ni sargentos, ni reglamento del servicio. Así se encuentra el Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SPEIS) de la Diputación de Salamanca, según Comisiones Obreras. Una situación que, según el secretario provincial del sindicato José Antonio Gallego, es “deplorable y muestra la desidia y la mala praxis de la Diputación en este servicio”.
A todas estas carencias se suma la falta de personal de la Diputación de Salamanca en los parques provinciales, la carencia de mandos (todos los funcionarios son cabos y bomberos), los sueldos (que son los más bajos de Castilla y León) y, además, el jefe de Servicio de Gestión de Servicios Urbanos, GSU, realiza funciones de bombero sin la cualificación y capacitación requerida para ello, según asegura el sindicato. “El servicio no está dirigido por alguien que sepa de prevención de incendios. Lo está llevando el jefe del GSU, que lleva el ciclo del agua y la prevención de incendios. El no puede dirigir el servicio sin formar parte de la estructura y eso, a lo mejor explica lo que pasa”, asegura Esther Rodríguez, representante sindical de CCOO en la Diputación.
Falta de personal
En cuanto al personal, aseguran que es insuficiente. Cifran en unos 110 profesionales la necesidad total del SPEIS para atender a la provincia. Algo que “sobre el papel está” ya que se han creado en la Relación de Puestos Laborales de La Salina los puestos para este 2025 sin embargo, todavía no están convocadas las plazas. En cuanto a las que se cubrieron el pasado mes de agosto, afirman que los aprobados todavía no han recibido la formación específica necesaria tras pasar el proceso selectivo. Esta falta de formación hace que no puedan realizar intervenciones en caliente.
Una situación que hace que la Diputación se vea obligada a mantener el contrato de emergencia con la empresa que gestiona el parque de bomberos de Villares. “Entendemos al personal de la empresa. Los trabajadores se enfrentan a un futuro incierto y lamentamos su situación”, han asegurado.
En cuanto a la falta de personal han realizado un listado de carencias uno por uno. Así, en el parque de bomberos de Vitigudino faltan 2 bomberos, 6 cabos y un sargento, en Ciudad Rodrigo y Béjar faltan 3 bomberos, 3 cabos y un sargento en cada uno de ellos, en Villares de la Reina faltan 6 bomberos y un sargento. Faltan por cubrir, según el sindicato, 18 plazas de bombero, 12 cabos, 4 sargentos, 2 suboficiales, un oficial técnico y un oficial superior.
Además, muchas plazas están cubiertas por interinos y la bolsa de empleo está agotada ya que la mayoría abandonan el servicio cuando consiguen una vacante en otra provincia, algo que ocurre incluso con los funcionarios. Esto se debe, además de las condiciones del servicio, al salario. La Diputación es la que peor paga a los profesionales de extinción de incendios de la comunidad, como ya adelantó Salamanca 24 horas en esta información. Según CCOO, el complemento específico es, como mínimo 500 euros más bajo que en el resto de las provincias de Castilla y León. Si se compara con el servicio del Ayuntamiento de Salamanca, los de la Diputación cobran la mitad. El complemento específico del Ayuntamiento de Salamanca es de 12.345 euros al año, mientras que el de los de la Diputación es de 6.430 euros al año, sin contar, que en el Ayuntamiento de Salamanca los bomberos tienen un nivel 21 y en la Diputación un 18.
Una situación que, según el sindicato, hace que el servicio carezca de calidad y rapidez ante las emergencias. “Si no hay mandos que analicen la situación y coordinen se dan riesgos, la ciudadanía está corriendo riesgos. Si no tenemos profesionales que puedan acudir a una emergencia la ciudanía está corriendo riesgos”, afirma Mª Cruz Caballo, representante sindical en la Diputación. También se pone en riesgo “la vida de los trabajadores, voluntarios y funcionarios”.
De hecho, el sindicato ha reiterado la denuncia que hicieron el pasado mes de diciembre cuando aseguraron que había habido tres intervenciones en las que se habían registrado incidentes graves en Gallegos de Argañán, Ciudad Rodrigo y Miranda del Castañar, con dos fallecidos.
Una situación que ha llevado al sindicato a denunciar ante la inspección de Trabajo la situación de los integrantes del servicio de prevención y extinción de incendios de la Diputación.
Por otra parte, Comisiones Obreras ha querido responder a Javier Iglesias, que el sindicato lo que pretende es que se cumpla la ley, que se está incumpliendo desde el año 2007 y recuerda que es una ley aprobada por el PP en Castilla y León. Añaden que si no se han hecho mejoras en el servicio en estos años es porque la Diputación "no se ha puesto las pilas". Añaden, además, que ni se ha respondido a peticiones de información ni se han contestado alegaciones, como las presentadas al reglamento del servicio, que está paralizado desde 2023 tras el periodo de exposición pública.
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