Terminaba el general de la división de la Guardia Civil, José Antonio Iglesias Pollo, su discurso bromeando sobre que Amaral le había copiado una de sus frases para referirse con el chascarrillo a que sin ellas “no soy nada”, en agradecimiento a su mujere y sus hijas.
Precisamente usando las letras de las canciones, pero de un grupo quizá no tan conocido como Amaral, pero sí de Castilla y León como es La M.O.D.A., se podría resumir a la perfección el sentir del general Iglesias Pollo en el día de hoy.
Entre las letras de este grupo burgalés se puede escuchar un “no te olvides de dónde vienes” y quizá sin haberse percatado nunca de que un grupo muy cerca de la que fue su casa, puesto que estuvo muchos años en La Rioja, José Antonio lleva ese lema marcado en la piel.
Moriscos es el pueblo que le vio crecer y ahora, después de más de 40 años de carrera profesional, le ha vuelto a ver caminar por sus calles para que su nombre quede para siempre más ligado al municipio.
En un emotivo acto con presencia de sus familiares y amigos, mención especial “para mis padres, Antonio y María Antonia, que con 97 y 97 años no han dudado en venir desde Logroño”, así como personalidades políticas y de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado ha sido nombrado hijo predilecto de Moriscos y su nombre estará siempre ligado al renovado edifico multifuncional, seña del crecimiento de una localidad muy distinta a cuando el general, en su infancia, “aprendía lo que es la vida” y guardaba trastadas en su memoria, “siempre recordadas en la familia. Como cuando mi primo y yo encerramos a dos gallinas en un cajón y cuando volvió mi tía habían puesto media docena de huevos”, o fantasías, bajo la tutela de la Virgen Peregrina, puesto que “pensábamos que había un pasadizo bajo la pila bautismal que guardaba no sé qué tesoro”.
Un crecimiento de un pueblo que mira al futuro, “a mejor”, pero que debe hacerlo sin “perder el espíritu de pueblo, ¿cuántos madrileños quisieran tener uno? Yo siempre he presumido que era de pueblo. Son nuestras raíces, nuestros referentes familiares y nuestra identidad y eso no lo podemos perder”.
Regresa así a casa una vez más José Antonio Iglesias Pollo, “un hijo del pueblo”, como anunciaba el alcalde de Moriscos, Jesús Manso, que le ha pedido que “vayas donde vayas, lleves con orgullo su nombre” (refiriéndose al pueblo). Algo que hará sin duda, tal y como ha confesado el general, “Moriscos es mi tierra, de mis abuelos, bisabuelos… les puedo asegurar que cuando me necesiten, aquí estaré”.
*GALERÍA DEL ACTO AQUÍ