Ciudad Rodrigo volvió a vibrar este sábado con el Festival de la Charrada, un evento cargado de folclore y sentimiento que llenó la Plaza Mayor de ritmos, colores y orgullo salmantino. Desde las 17:00 horas, el corazón de la ciudad acogió a grupos locales y comarcas invitadas que ofrecieron un espectacular recorrido por las tradiciones de Salamanca y otras regiones.
El festival comenzó con la actuación de grupos locales como Botón Charro, Al Son del Tamboril y Aires Charros, este último muy aplaudido por su enérgica puesta en escena. Luego, comarcas como la Sierra de Francia (Santibáñez de la Sierra, La Alberca, Mogarraz y Cepeda), La Ribera (Hinojosa de Duero), Campo Charro (Lumbrales), Tierra de Alba y La Armuña (Valdecarros y Pitiegua), El Rebollar (Peñaparda y Robleda) y hasta una representación llegada desde Huelva, mostraron con orgullo sus bailes, músicas y trajes típicos.
Uno de los momentos más emotivos fue la entrega del Premio Encina Charra al tamborilero de Robleda, José María Mateos Valiente, y a su pareja, Catalina Sánchez Moreno, reconocida a título póstumo por su labor como bailadora y cantadora.
La jornada concluyó con bailes populares abiertos al público, donde vecinos y visitantes compartieron danza y alegría en una celebración que reafirma la fuerza de la cultura tradicional.
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