La ilusión y el trabajo de varios días se han visto truncados por culpa de la lluvia. La Hermandad Dominicana no ha podido sacar sus cuatro preciosos pasos a las calles de Salamanca para lamento de cofrades y fieles de la procesión por excelencia de la madrugada salmantina.
Así lo ha decidido la hermandad, reunida su Junta de Gobierno de forma extraordinaria, que ha querido primar la seguridad y el cuidado de las imágenes y en el último momento ha decidido no salir a la calle y realizar una oración dentro de la propia iglesia de San Esteban, lugar desde el que iban a partir los pasos de Nuestro Padre Jesús del Perdón, el Cristo de la Buena Muerte, ‘La Piedad’ y la Virgen de la Esperanza.
Ha sido el hermano mayor Delfino Gómez Montero quien ha dado la triste decisión a sus compañeros de cofradía: "Siento mucho tener que dar esta noticia. Por la seguridad de vosotros, hermanos, que cualquiera puede tener un patinazo o cualquier cosa y después el patrimonio de la Hermandad. Con lo cual queda suspendida la procesión de este año. Hermanos, lo siento no he podido hacer otra cosa" ha concluido un apenado Gómez Montero que ha sido aplaudido al finalizar por el resto de sus hermanos.
Inevitables lágrimas de muchos cofrades que llevan trabajando desde hace semanas para que todo estuviera a punto. La hermandad ha abierto las puertas del templo para dejar entrar a las numerosas personas que se habían agolpado a las puertas de San Esteban con la ilusión y la esperanza de poder ver la procesión.
Un mazazo para muchos cofrades que ven como la procesión de la Dominicana se suma a otras de la capital que no han podido procesionar a lo largo de esta Semana Santa.