Un año más, el Campo de San Francisco y la figura de San Francisco de Asís ha sido testigo de la tradicional celebración de San Antón en Salamanca capital que, pese a que desapareció por los años 60, se recuperó hace 45 años de la mano del veterinario local Eleuterio Ferreira y el capuchino David de la Calzada, con el protagonismo de las mascotas y la desaparición de los animales de trabajo.
De esta manera, a las 12:30 horas de este viernes, el superior de los padres Capuchinos, Domingo Montero ha procedido a bendecir a todos los animales que han asistido a esta cita.
Este año, los más mayoritarios han sido perros y gatos, aunque también se han dejado ver una tortuga y hasta un gallo de corral.
La propietaria de Turbina, una tortuga de unos 15 años es una de las dueñas más asiduas de esta festividad, ya que lleva acudiendo a la bendición por San Antón desde hace una década. Según relata a Salamanca24horas, antes lo hacía con uno de sus perros, y ahora cada año acude con una de sus cinco tortugas. Este, le ha tocado el turno a Turbina, porque dice que era la única de las cinco que no estaba aletargada.
Otras de las mascotas que han recibido por primera vez la bendición son los chihuahuas Río y Tor. En este caso, la dueña de Tor, un can de raza chihuahua y yorkshire, confiesa que ha traído a su mascota hasta el Campo de San Francisco porque “una bendición no le cae mal a nadie” y también con el anhelo de que ladre menos.
Muchas de las mascotas, especialmente, las de menor tamaño han acudido engalanadas con abrigos para protegerlos del frío e incluso con carritos. Además, en esta edición llama la atención que han sido mucho los propietarios que se han estrenado, acudiendo por primera vez. En este caso, al igual que Río y Tor, ha sucedido lo mismo con Lúa, un perro de agua.
GALERÍA | Bendición de San Antón en el Campo de San Francisco 2025. Fotos Andrea M.
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