“Todo en fin a medianoche reposaba, y tumba era de sus dormidos vivientes la antigua ciudad que riega el Tormes, fecundo río, nombrado de los poetas, la famosa Salamanca insigne en armas y letras, patria de ilustres varones, noble archivo de las ciencias”. Así describe ‘El estudiante de Salamanca’, la ciudad. José de Espronceda narra en verso un duelo en las calles de una ciudad que ha sido referenciada en multitud de obras. Autores clásicos, contemporáneos, en verso o en prosa,... han sido muchos los escritores que han hecho de Salamanca el lugar donde transcurren andanzas, picarescas, misterios o la vida. Desde Cervantes a la recordada Carmen Martín Gaite a los actuales Arturo Pérez Reverte, María Suré o Rodrigo Cortés. Autores vinculados por nacimiento con Salamanca y su provincia o porque determinaron utilizar la ciudad universitaria por excelencia para ambientar su obra y narrar acontecimientos históricos.
Lázaro de Tormes aseguraba en el inicio del famoso Lazarillo de Tormes que su nacimiento “fue dentro del río Tormes”. El pícaro más famoso de la literatura española contaba sus andanzas, venturas y desventuras en la ciudad junto a la que nació, ya que él era natural de Tejares y Tejares entonces era una “aldea” de la provincia. La otra gran obra de la literatura española que siempre se ha vinculado a Salamanca es la Celestina, a pesar de que la ciudad del Tormes no se menciona en el texto. Sin embargo, Fernando de Rojas estudió en Salamanca, por lo que conocía la ciudad y el denominado entonces huerto de la casa del Arcediano, desde 1981 Huerto de Calixto y Melibea.
Cabe destacar que hasta el ilustre Cervantes eligió a la antigua Salamanca para situar la acción de sus personajes. En ‘La tía Fingida’ hacía referencia a la ciudad como “madre de las ciencias, archivo de las habilidades, tesorera de los buenos ingenios y que de ordinario cursan en ella y habitan diez o doce mil estudiantes, gente moza, antojadiza, arrojada, libre, aficionada, gastadora, discreta, diabólica y de humor”. En el Licenciado Vidriera narra la vida estudiantil. Arranca así la obra: “Paseándose dos caballeros estudiantes por las riberas de Tormes, hallaron en ellas, debajo de un árbol, durmiendo, a un muchacho de hasta edad de once años, vestido como labrador”.
“Tenía muchas ganas de escribir sobre mí, mis orígenes, mi zona, mi cultura”, asegura María Suré que centró en la Sierra de Francia su segunda novela ‘Huérfanos de sombra’. La autora, natural de Santiago de la Puebla, ubicó la trama de su novela negra en Aldeanegra, un municipio inventado fiel reflejo de la Sierra de Francia. “Es una novela un poco negra y siempre me había fascinado la Sierra de Francia, las Batuecas, es una zona con mucha magia y cuando decidí hacer la novela opté por centrarla en esta zona”, afirma. No será su única novela ambientada en Salamanca ya que la autora, que ya ha terminado su sexto libro que saldrá publicado en 2026, está trabajando en la trama de la siguiente. “Estoy tramando una novela ambientada en Salamanca, en 1473”, anuncia y adelanta que se trata de “un thriller histórico” reconociendo que es “el reto más grande al que me he enfrentado, me he encontrado con cosas de Salamanca, de aquella época que no sabía y me está suponiendo un reto importante”.
La reconocida Carmen Martín Gaite, salmantina ilustre y homenajeada este año en Salamanca al ser el centenario de su nacimiento, centro en su ciudad dos de sus obras. ‘Entre Visillos’, su primera novela, muestra la Salamanca de los años 50, narrando paseos por la Plaza Mayor, clases en el Instituto Femenino de Enseñanza Media o fiestas en el Casino mientras que en ‘El cuarto de atrás’ la propia autora revive su infancia y juventud en la ciudad.
En ‘El Manuscrito de fuego’, Luis García Jambrina narra un asesinato en Béjar y a pone a Fernando de Rojas y a Alonso, un estudiante de la Universidad de Salamanca a resolver el crimen. El misterio continúa en “Non Serviam: la cueva del Diablo”, donde la salmantina Carmen Cervera libra la batalla entre el bien y el mal, con la Cueva de Salamanca, la Universidad o las catedrales como escenario. Félix G. Modroño hace que su protagonista pase por Salamanca y su ambiente universitario mientras investiga la procedencia de una talla de un Cristo en 1682.
Jaime Fanjul, protagonista de ‘Los años extraordinarios’ de Rodrigo Cortés, nació en Salamanca lo que hace que la ciudad aparezca a través de sus recuerdos. También aparece la ciudad del Tormes entre la lista de lugares que recorre la teniente Lucía Guerrero, miembro de la UCO de la Guardia Civil mientras sigue a un homicida en ‘Lucía’ de Bernard Minier que fue número 1 en ventas en Francia. Arturo Pérez Reverte lleva al protagonista de su trilogía ‘Falcó’, a ser espía en la Salamanca de 1936, al inicio de la guerra civil y por las calles de esa ciudad, capital del bando nacional, tiene parte de la acción.