El Consejo de Ministros aprobó una reforma del subsidio de desempleo la pasada semana. Esta reciente modificación trae consigo una serie de novedades entre las que destacan la subida de la cuantía de la prestación, su ampliación respecto a los colectivos beneficiados y se va a eliminar el supuesto de despido automático, en el caso de invalidez permanente.
De esta manera, desde el Ministerio de Trabajo quieren que se eleve el porcentaje del indicador de rentas múltiples (IPREM), que se utiliza para calcular el subsidio. Esto se traduce en que las cuantías van a ascender los primeros seis meses al 95% del IPREM (unos 570 euros mensuales, 90 euros más). Después, los siguientes seis meses van a bajar al 90% del IPREM y el resto del periodo, hasta un máximo de 30 meses, se situará en el 80% como se encuentran ahora mismo.
La cotización por jubilación de los perceptores mayores de 52 años se mantiene en el 125% de la base mínima vigente.
Sin embargo, este real decreto de dicha reforma tiene en su interior letra pequeña. En algunos casos, podría suponer una rebaja en las cotizaciones para la jubilación. Concretamente, en el en el Real Decreto-ley 2/2024 se cita que "la entidad gestora (el SEPE) cotizará por la contingencia de jubilación durante la percepción del subsidio por desempleo para trabajadores mayores de cincuenta y dos años".
De la misma manera, "a efectos de determinar la cotización se tomará como base de cotización el 125 por cien de la base mínima de cotización en el Régimen General de la Seguridad Social, vigente en cada momento". Por su parte, se debe teneer en consideración que "en caso de percibir el complemento de apoyo al empleo, la base por la que deberá cotizarse se reducirá en proporción a la jornada trabajada".
Finalmente, en la práctica, esto se traduce en que no sería posible compatibilizar un trabajo a tiempo completo, o bien a tiempo parcial con este subsidio sin que no se produzca una rebaja en la base de cotización. Esto afecta directamente a la cuantía de la pensión de jubilación.
Para ello, la mejor opción para las personas que reúna los requisitos para solicitar el subsidio para mayores de 52 años se tarta cobrar, en primer lugar, la ayuda y después encontrar un trabajo, sin tener que compatibilizar ambas situaciones, y así no se produciría una rebaja en las cotizaciones.
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