Pese a que está siendo una de las mejores noticias del 2021, la vacuna frente al COVID-19 está trayendo varios quebraderos de cabeza. El no aprovechamiento de todas las dosis -algo que sucedió, principalmente, en Andalucía- o personas, principalmente políticos, que se han vacunado cuando no les correspondía -esto ha ocurrido por toda España- son algunos de los ejemplos de los problemas que están surgiendo.
Precisamente, ambos aspectos están presentes en la última queja relacionada con la vacuna y que ha tenido como protagonista al Complejo Asistencial Universitario de Salamanca (CAUSA). Mientras que en los hospitales charros se sigue vacunando y a buen ritmo, cumpliendo por el momento con el protocolo, este pasado miércoles ha surgido la polémica por las listas de vacunación.
En concreto, y según ha podido saber SALAMANCA24HORAS, varios profesionales han mostrado su descontento porque, según acusan, el Hospital de Salamanca “se ha saltado la lista” de vacunación al sobrar vacunas, sin dar preferencia a los sanitarios de primera línea cuando han sobrado dosis, tal y como ocurrió este pasado 3 de febrero.
De estos dos aspectos, desde el CAUSA se niega categóricamente que se haya saltado u obviado dicha lista. Lo ocurrido es que para este miércoles estaba prevista la inyección de 261 dosis de la vacuna contra el COVID-19. Sin embargo, sólo pudieron administrarse 232, por lo que rápidamente se citó a 29 profesionales del “listado de reserva” para ponerles las vacunas que ‘sobraron’.
Una citación que se hizo “de urgencia”, como recalcan fuentes hospitalarias, con el objetivo, precisamente, de evitar desaprovechar ni una sola dosis. Los citados fueron, según estas mismas fuentes, “varios de los que se iban a vacunar este jueves, personal que quedaba de grupos COVID, multidisciplinares y profesionales de servicios críticos pendientes”, remarcando que todos estaban en el grupo prioritario de vacunación.
No obstante, varios de los profesionales del CAUSA no coinciden en esa afirmación, y aseguran que las dosis sobrantes “se pusieron aleatoriamente, sin conocerse a los criterios, vacunando a unos compañeros del servicio de tarde y no a otros”. De hecho, indican que varios de los sanitarios que recibieron la dosis pertenecían al Servicio de Nefrología que, según el Plan de Vacunación, no está en ese grupo prioritario.