La Catedral Nueva de Salamanca se ha llenado de solemnidad y emoción este domingo con la interpretación del 'Miserere' de Doyagüe. El evento, organizado por la Junta de Semana Santa, ha contado con la presencia de la concejala de Relaciones Institucionales, Festejos y Tradiciones Carmen Seguin.
Un centenar de alumnos de la Escuela Municipal de Música se han volcado en la interpretación in situ, demostrando su talento y pasión por la música sacra. El concierto ha contado con la participación de las voces solistas de la soprano María del Monte Pindado, la mezzosoprano Ana María Hidalgo Carnicero, el tenor Jesús Calvo Cilla y el barítono Antonio Santos García. Todos ellos acompañados por la Capilla Siglo XXI, bajo la dirección de Raúl J. Ortiz Hierro, y el Coro Ciudad de Salamanca, dirigido por Antonio Santos García.
El programa ha incluido una de las composiciones más célebres del compositor salmantino, el ‘Miserere en La menor’, junto con las ‘Lamentaciones de Jeremías’, el motete ‘Usquequo’ y la antífona ‘Christus Factus Est’. Estas obras evocan la música litúrgica de los siglos pasados, que se interpretaba durante el Oficio de Tinieblas del Viernes Santo.
Uno de los momentos más destacados del concierto, la interpretación, por primera vez en tiempos modernos, de dos nuevas composiciones de Doyagüe: la ‘Lamentación Segunda del Viernes Santo’ a solo de bajo y la ‘Lamentación Tercera’ a solo de tenor. Estas obras, rescatadas gracias al trabajo de investigación y transcripción musicológica de Josefa Montero García, fueron interpretadas en exclusiva para este concierto, añadiendo un valor especial a la cita.
La tradición de interpretar cada cuaresma un Miserere de Manuel José Doyagüe, recuperada en 2013, se ha consolidado como una cita anual para el público salmantino.