El mundo del cine, de la música o el momento de sellar un compromiso de por vida, no depende únicamente de una persona, que normalmente es la que pone la cara, sino que todo lo que rodea este entorno hace que el ambiente que se cree se vista de gala para el momento. Ahí se erige un papel fundamental, sobre todo de cara a las cámaras y los focos, el de la maquilladora, encargada de dar vida y corregir cualquier error que se pueda producir.
Entre la cantidad de personas que se dedican a ese oficio, una salmantina se ha llegado a situar como una de las mejores de Castilla y León y hasta en el ámbito profesional, hablamos de Yasmina Tahajit Sánchez, que ha ido caminando poco a poco por el complicado camino del mundo de la estética, hasta ser un referente para muchas personas, tanto por los logros conseguidos, los que están por venir y la cantidad de alumnos que se ponen en sus manos para aprender.
Sus orígenes parecían entrever a lo que se dedicaría en un futuro. La influencia de su abuela, sin saberlo ella de mayor, sería clave para entender a qué se dedica actualmente. Y es que ella se lo ha ganado por sí sola, pero cabe destacar que la madre de su madre, en una furgoneta y con tres trajes de boda, se encargaba de poner guapas a las novias en diferentes pueblos de Marruecos.
Comenzó a través de una gran marca, reconocida a nivel nacional, cuando participó en un concurso en el que quedó entre las diez primeras. Uno de los primeros premios era nada más y nada menos que maquillar en Broadway, la cuna de los musicales y del arte, en uno de los 41 teatros que se exponen al mundo como referencia de la cultura. En otra marca reconocida a nivel nacional, también participó en otro concurso, llegando a quedar primera entre centenares de participantes.
Poco a poco van llegando las oportunidades, y al igual que hay trenes que solo pasan una vez, Yasmina ha ido adquiriendo los conocimientos necesarios para ir formándose: “He trabajado en desfiles, alfombras rojas y ya me fui enfocando poco a poco en la gestión de equipos. Tras un periodo como gerente en una empresa de maquillaje, volví a los pinceles tras estar llevando a un equipo”.
El mundo del arte en sus manos
No es fácil abrirse hueco en el mundo de la cultura, pero algo destaca y mucho en Tahajit: “Yo sabía que iba a conseguir muchas de las cosas que se han logrado, cuando se me mete algo entre ceja y ceja, lo consigo”. Y es que la actitud ganadora hace a la hora de encontrar trabajo y de que te llamen para realizar una u otra labor.
En el apartado musical, recientemente se encargó en Salamanca de maquillar a dos bandas de música conicidad a nivel nacional e internacional, Despistaos y Veintiuno, que les preparó de cara a los focos en la Plaza Mayor de Salamanca para el nuevo videoclip. Y es que a pesar de que parece un trabajo sencillo, hay que saber cuales son los puntos exactos para que no se reflejen las luces en los propios cantantes, además de dar una sensación de normalidad absoluta en los tonos de la piel.
Su experiencia en la gestión de equipos, llevó a Yasmina a moverse por todo Valladolid y Castilla y León para conseguir uno de los cometidos que la alzaron por encima de las demás maquilladoras, los Goya: “Yo me enteré de que iban a ser en Valladolid y dije, ‘voy a estar ahí’, además de que sé el nivel que tengo y de que no hay maquilladores de mi talla, que estén tan formadas. Lo primero, me puse de contacto con mi compi de equipo y preparamos un portfolio conjunto y fuimos puerta por puerta, y nos fueron dando información hasta que pudimos meter cabeza”, además, cabe destacar que “fue increíble ya que hasta dos semanas antes no nos dieron respuesta, pero yo sabía que nos lo iban a dar”.
Otro de los destinos clave en su carrera fue Madrid, más en concreto, el Wizink Center, donde estuvo maquillando a Merino antes de uno de los conciertos de estos en uno de los escenarios más importantes de España y del mundo.
Las bodas como concepto de experiencia única a través del maquillaje que la ha situado a nivel internacional
Su mayor parte del tiempo la dedica a las bodas, a engalanar a todas esas parejas para el momento más especial de su vida. La pasión que expone en cada uno de los trabajos se torna clave para entender el éxito de su trabajo. Al fin y al cabo “convierte el maquillaje en una experiencia inolvidable para mis clientas”.
Esto ha llevado a Yasmina a bodas internacionales, hasta el punto que ha conseguido maquillar, nada más y nada menos, que novias en celebraciones hindúes, algo nada sencillo teniendo en cuenta la calidad y el trabajo que lleva este tipo de eventos en cuanto a maquillaje.
Objetivos y proyectos en el futuro
Yasmina Tahajit Sánchez sigue formándose poco a poco. A pesar de que lleva desde veinte años en este ámbito, desde los 17 años, sabe que una de las claves es seguir aprendiendo, tanto para adquirir conocimientos como para contactar con personas que necesiten sus servicios. Además, compagina esto con la formación a otros alumnos, que se ponen en sus manos para conocer de cerca la labor de las maquilladoras y el realizar un trabajo efectivo, pero estético y bonito a la vez.
Dentro de esto, ella seguirá creando experiencias en su clientela, que sigue confiando en ella con una agenda que abarca todo este 2025, además de seguir realizando todo tipo de proyectos relacionados con el bienestar corporal de las personas y la belleza.