Los maestros de la región y, por supuesto, de Salamanca, han alzado la voz en pro de unas oposiciones más justas. Son muchas las comunidades autónomas de España que han pospuesto las pruebas hasta 2026, siendo las oposiciones a este cuerpo en Castilla y León una de las únicas sin restricción de idiomas, lo que hace que las posibilidades de la región castellana hayan disminuido notablemente para 2025.
El problema no está solo en que muchas personas se vayan a presentar sino que las posibilidades de otras personas de Cataluña o Galicia se ven aumentadas por el mero hecho de otras lenguas oficiales. Por ejemplo, si en Cataluña una persona puede presentarse en 2026, también podría hacerlo en 2025 teniendo dos posibilidades. En el caso de un salmantino, únicamente podría hacerlo en Castilla y León porque, al no saber catalán, uno de los requisitos que se piden, no podría presentarse.
Es el caso de una maestra anónima de Salamanca, que no ha querido dar su nombre para evitar represalias, donde el mensaje que ha lanzado ha sido muy claro: “Al final lo único que pedimos es igualdad entre comunidades, para que, dentro de lo que sea posible, trabajar próximos a nuestras ciudades de residencia”.
Del mismo modo, con respecto a los propios sindicatos, han explicado que “nos han dejado abandonados”, por no alzar la voz para que se posponga estas oposiciones hasta 2026, o buscar medidas que sean justas para el conjunto de España: “Es una impotencia de ver que este sistema de oposiciones no hace más que perjudicarnos a los castellano leoneses, y más en esta futura convocatoria con el efecto llamada que va a haber”.
Los puntos que han considerado de vital importancia en cuanto a estas oposiciones han sido varios. El primero de ellos ha sido rechazar el efecto llamada debido a que “la celebración de las oposiciones en nuestra comunidad supondrá un claro llamamiento a los miles de opositores de otras comunidades (que o se están preparando o vienen “a probar”), lo que supone una competencia desleal para los castellanoleoneses”.
Segundo, la necesidad de una protección clara de Castilla y León ya que “mientras otras comunidades han adoptado medidas que protegen en 2025 a los aspirantes de su comunidad, como el caso de Cantabria, aquí no se contempla ninguna acción que nos ampare siendo tachadas como anticonstitucionales.
Tercero, la necesidad de no ser los únicos con proceso de acceso libre en 2025 ya que otras comunidad autónomas como Andalucía “están luchando activamente para paralizar su oposición; Cantabria tiene el proceso cerrado desde la convocatoria de 2024, en Galicia se pide como requisito el idioma y el resto de las comunidades ha comunicado que no se celebrarán hasta 2026”.
Por último, una gran crítica a los sindicados donde consideran que “nos han abandonado” ya que “es realmente preocupante la actitud pasiva de los sindicatos ante esta situación, quienes al margen de velar por los intereses y derechos docentes de nuestra comunidad, nos responden ante las quejas que ‘qué esperamos’, que ‘nos saquemos más menciones para trabajar’, publicitan la oposición de la comunidad en redes o nos mandan carteles publicitarios en los que publicitan sus propias academias de preparación.
Por último, han realizado una recogida de firmas para hacer fuerza y aunar las voces de todos los maestros de Castilla y León para pedir justicia por estas oposiciones. Para ellos, han facilitado esta página web para hacerlo.