El jueves, 7 de noviembre, se celebrar el Día Internacional contra la Violencia y el Acoso Escolar, una jornada que sirve para recordar una de las lacras sociales que aún quedan por saldar y en la que se tiene que seguir trabajando, tanto desde las instituciones públicas como a nivel personal y familiar, en las casas, en la educación que no se ve y tan importante es.
Carmen Guillén, presidenta de la Asociación Salmantina contra el Bullying y el Ciberacoso, ha lanzado un mensaje muy claro, alzando la voz por los cientos de niños que sufren en silencio: “Las cosas de niños también matan y roban infancias”. La idea es clara, no podemos refugiar el dolor y la tristeza de todos esos niños bajo el velo de la excusa de que son cosas de críos.
Del mismo modo, hay que hacer hincapié en que una broma, deja de ser una broma cuando no hace gracia a los dos. Y es que la felicidad en los entornos tiene que ser social, no individual, y es en lo que hay que seguir luchando en pro de una sociedad más justa en donde los pequeños de la casa no tengan miedo a ir al colegio, a salir a la calle o a realizar cualquier actividad extraescolar por miedo a ser juzgado.
Ante la falta de control en esta materia, a veces tapada por los centros escolares o incluso, en algunos casos, por algunos profesores, Carmen Guillén expone que “tenemos que actuar bajo el manto de la ley”, todo esto, para evitar que se den casos como los ocurridos en Salamanca donde algún padre se ha tomado la justicia por su mano ante la falta de soluciones tempranas ante el sufrimientos de sus hijos.
La Asociación Salmantina contra el Bullying y el Ciberbullying pone a disposición de las familias todas sus vías para ayudar en caso de que se de algún tipo de acoso. El teléfono 644 84 86 09, el correo ascbyc@gmail.com o en la calle Ramón y Cajal número 5-7, siempre en confidencialidad y resguardando la identidad de la persona que solicita ayuda.