La Cámara de Comercio acoge este miércoles las Jornadas para Vigilantes de Seguridad, que tienen lugar entre las 9:30 y las 14 horas y las 16 y 20:30 horas y continuará el jueves, en este caso para directores y jefes de seguridad, en la sede de la Policía Nacional sita en la Ronda Sancti Spiritus.
A su inauguración acudieron el subdelegado del Gobierno, Antonio Andrés Laso, el comisario jefe provincial de Salamanca, Francisco Martín, y el comisario jefe de la Unidad Central de Seguridad Privada.
El comisario Francisco Martín explicó que con estas jornadas se pretende “un acercamiento mayor de la Policía Nacional respecto a los servicios de seguridad privada” para que todos estos sepan que en su actuación diaria “tienen un garante”, que es la Policía Nacional, como “responsable y órgano fiscalizador de las actividades de seguridad privada”.
Así, el objetivo de la Policía Nacional es detallar a la seguridad privada “las inquietudes en relación a la seguridad de los ciudadanos” y tener una toma de contacto sobre la figura del interlocutor sanitario, cuya figura corresponde a las unidades de seguridad privada, matizó Francisco Martín.
En el curso los temas versarán sobre la Instrucción 6/2017, de la Secretaría de Estado de Seguridad, en la que se imparte recomendaciones en materia de autoprotección y criterios de actuación ante la comisión de atentados terroristas.
Serán impartidas por personal de la Unidad Central de Seguridad Privada, así como Tedax y UPR de la Jefatura de Valladolid y personal de la Comisaría General de Información. Porque, como recordó Francisco Martín, “seguimos en nivel 4 de alerta” y todos los agentes de la seguridad privada deben tener conocimiento “de los objetivos y en qué medida pueden colaborar”.
Las competencias de Policía Nacional y seguridad privada están “bien delimitadas”
El comisario recordó que las competencias de seguridad privada y Policía Nacional están “bien delimitadas, ya que en la investigación de hechos delictivos la seguridad privada puede participar “en aquellos que no tengan carácter público” y lo hacen “como aliados de la seguridad pública”.
Así, “buscar cauces fluidos de comunicación” para que toda la información que la seguridad privada tiene “y que es muy valiosa” sea compartida con la seguridad pública y “redunde en beneficio de los ciudadanos”, aseguró Francisco Martín.
Y es que, pese a que la seguridad privada no tiene la condición de agente de la autoridad, estos ayudan a la labor de los servicios públicos, colaborando en la realización de dichos servicios, llevando a cabo las primeras medidas ante el conocimiento de la realización de un hecho delictivo público.