Con un informe firmado el 31 de julio de este año, y al que ha tenido acceso Salamanca24horas.com, los técnicos municipales del área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Salamanca presentaron una evaluación del estado de todos y cada uno de los árboles de la plaza del Oeste.
Un informe en el que se realiza un estudio de cada uno de los elementos de este arbolado, contando además con una ficha individual para cada uno de ellos, explicando, además, todas sus características, así como las afecciones y riesgos que presenta cada árbol.
Una ficha técnica que determina que todos los árboles situados en la plaza del Oeste están afectados por corteza incluida, una afección que se produce cuando el árbol crece y esta queda englobada entre la rama y el tronco, debilitando esa unión de la rama.
Este informe, que aseguran desde el Ayuntamiento que se dio a conocer a los vecinos del barrio del Oeste, choca con la petición de que solo se actuara sobre los árboles enfermos, dejando en pie aquellos que no se vieran afectados.
Desde el Consistorio aseguran a este medio que se consensuó con los vecinos del barrio las posibilidades y el tipo de árbol que sustituiría a los que se están podando esta semana, incluyendo, además, uno más en la nueva replantación en la plaza del Oeste y cerca de veinte en otras calles del barrio.
Del mismo modo, desde la asociación de vecinos solicitaron poder incluir un informe de un técnico externo, pero nunca se llegó a hacer entrega de ningún documento firmado por personal colegiado. Como otra solución, se estudió la posibilidad de colocar un elemento artificial para sostener la copa del árbol, una especie de lona que, no obstante, impediría la colocación de cualquier tipo de mobiliario urbano (sillas, terrazas, bancos…) bajo el árbol, por lo que se desechó.
Sobre los altercados que se vienen sucediendo esta semana y las protestas contra la tala de árboles, desde el Ayuntamiento se muestran sorprendidos, porque creían que “se había entendido y aceptado todo. No entendemos a qué viene ahora estas protestas”. Así mismo, reconocen que sí puede achacarse a un error del pasado en el momento el que se decidió colocar esa especie en un lugar por el que iban a transitar muchas personas, pero es algo que sucedió hace mucho tiempo y, reconocen, no se hubiera solucionado con una poda estructural, puesto que el árbol hubiera seguido creciendo.