Los termómetros de Salamanca están registrando temperaturas máximas de hasta 36 grados en los últimos días, lo que puede propiciar la aparición de un golpe de calor. Para actuar ante el mismo, el Servicio de Emergencias 112 de Castilla y León ha compartido sus síntomas más comunes a través de Twitter.
La ausencia de sudor, tener dolor de cabeza, mareos, orinar en poca cantidad, sentir debilidad, somnolencia, sequedad o enrojecimiento de la piel, hiperventilar, notar la aparición de calambres musculares y la aceleración de los latidos del corazón son los síntomas que pueden acompañar a un golpe de calor, un cuadro médico que se produce cuando la temperatura corporal se eleva por encima de 39,4º.
En casos extremos también se pueden tener convulsiones o sufrir una pérdida de conciencia. Para no llegar a alguna de estas situaciones, se debe reducir la temperatura corporal de la persona afectada llevándole a un lugar fresco, procurando que beba agua a pequeños sorbos o poniéndole paños con agua fría en la frente, nuca y cuello.