La Junta de Castilla y León ha decidido este lunes cerrar al completo los centros educativos de la comunidad autónoma para evitar la propagación del coronavirus.
Aunque las clases ya eran virtuales desde hace una semana, personal docente y no docente podía acceder a los mismos para realizar diversas tareas, hecho imposible desde esta semana y hasta el final del estado de alarma, salvo en casos excepcionales.
Además, la Consejería de Educación potenciará la plataforma de Internet por la que se están dando clases en esta cuarentena. “Los primeros días hubo problemas de acceso casi inevitables porque se triplicaron las visitas y la mayoría intentaba entrar en ella durante la misma franja horaria (de 10 a 13 horas)”, señala María del Rocío Lucas, consejera de Educación, que detalla que existen 700 aulas virtuales que mejorarán con la incorporación de servidores más potentes facilitados por la Consejería de Fomento y Medio Ambiente.
Lucas agradece que los profesores se estén adatando a este sistema “a pasos agigantados” y revela que el calendario escolar se respetará. Sin embargo, la consejera se muestra a favor de retrasar la Evaluación de Bachillerato para el Acceso a la Universidad, que está fijada para el 9, 10 y 11 de junio de 2020, a julio (convocatoria ordinaria) y septiembre (convocatoria extraordinaria): “Hemos planteado que se reduzca el contenido curricular, pero se reforzará el apoyo a los alumnos de Segundo de Bachillerato con nuevas herramientas, pues son una prioridad ahora mismo”.
Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios