El Ayuntamiento da a conocer el nuevo proyecto de ordenanza de terrazas para toda la ciudad y la especial para la Plaza Mayor, la Rúa y calles aledañas

Día importante de presentación en el Ayuntamiento de Salamanca este lunes, 16 de diciembre. El concejal de Protección Ciudadana, Fernando Carabias, ha dado a conocer esta mañana el proyecto de modificación de la ordenanza municipal reguladora de la instalación de terrazas de la ciudad; y también el nuevo proyecto de ordenanza municipal de la instalación de terrazas en la Plaza Mayor y en algunas calles aledañas, que hace meses fue declarado ilegal por el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León. 


 Terrazas Plaza Mayor
Terrazas Plaza Mayor

Según Carabias, ambos documentos "tienen como principio rector una mejora notable del espacio disponible para el tránsito de personas". En la presentación de ambos documentos han estado presentes, además del concejal, el presidente de la Asociación de Hosteleros, Álvaro Juanes; y el presidente de la Asociación de Empresarios del Comercio (Aesco) y de la Cámara de Comercio de Salamanca, Benjamín Crespo.

Los dos documentos han sido remitidos a los grupos políticos y serán analizados este miércoles, día 18 de diciembre, en la comisión informativa correspondiente para su posterior debate en el pleno municipal del Consistorio salmantino el próximo día 27. Después se someterá a exposición pública y, teóricamente, deberán entrar en vigor a finales de febrero o inicios de marzo.

Durante la rueda de prensa, Carabias ha asegurado que ambos documentos cuentan con un "alto grado de consenso" y de "participación", aunque también ha comentado a preguntas de SALAMANCA24HORAS que "ninguna asociación de vecinos se ha puesto en contacto con este concejal para realizar propuestas". Según ha dicho, las ordenanzas serán "muy positivas" para todos los salmantinos, que van a ganar espacio "para el disfrute de la vía pública", también "podrán acceder con facilidad a los comercios, contemplar sus escaparates y seguir disfrutando de la calidad del servicio de los establecimientos de hostelería". 

Además, Carabias ha explicado que las terrazas tendrán "más orden", una "mayor armonía visual" y "sin los graves perjuicios económicos y para el empleo que acarrearía posturas como la total eliminación de las terrazas". Sobre esto, ha afirmado que solo en la Rúa unas sesenta personas se quedarían sin empleo con la eliminación de las terrazas.

El concejal ha anticipado también a los periodistas que el Ayuntamiento de Salamanca pondrá "todo su empeño" en que las normas recogidas en estas ordenanzas se cumplan a rajatabla. Así, ha avanzado que se adoptarán todas las medidas legales oportunas para evitar abusos, llegando incluso a la retirada de la concesión de terraza al establecimiento que cometa alguna falta grave.

Ordenanza general

Sobre la ordenanza general de terrazas, Fernando Carabias ha indicado que para la concesión de nuevas licencias o para la revisión de las existentes se tendrá en cuenta evitar o minimizar las posibles molestias derivadas de su existencia, ubicación o explotación.

Al respecto, ha detallado que entre las principales novedades se establecen dos temporadas para las terrazas, la anual y la parcial, comprendida entre el 1 de mayo al primer domingo de octubre. Además, ha avanzado que en los soportales quedará siempre "un paso libre de un mínimo de dos metros lineales" y que se exigirá "limpieza, salubridad y condicones de seguridad en todo momento". Además, ha afirmado que sólo se autorizará una única mesa alta para fumadores junto a la puerta del establecimiento, "siempre y cuando no esté instalada la terraza".

Plaza Mayor y calles aledañas

En cuanto a la ordenanza de la Plaza Mayor y calles aledañas, el concejal ha afirmado que su ámbito de aplicación abarca además la Rúa Mayor, calle Concejo, calle Espoz y Mina, plaza de la Libertad, calle Meléndez, calle Obispo Jarrín, plaza de San Julián, plaza del Peso, plaza del Poeta Iglesias, calle Sánchez Barbero, plaza del Mercado y plaza del Corrillo.

Entre sus principales novedades incluye que las licencias tendrán un periodo de vigencia máxima de dos años, tras el cual podrán renovarse en los mismos términos siempre y cuando no existan variaciones en el número de licencias concedidas para establecimientos dentro de la zona.

Además, ha señalado que para favorecer el empleo y la calidad del servicio, se establece que el titular de la licencia será responsable de que la terraza se sirva y esté atendida de forma real y efectiva por personal del establecimiento durante todo el horario de explotación. Por lo tanto, se pone punto y final a las terrazas no atendidas en las que los clientes deben convertirse en sus propios camareros.

Por otra parte, "buscando una armonía visual y una mejora estética acorde con la monumentalidad", en la Plaza Mayor y en la Rúa todo el mobiliario que se instale será de carácter único, tanto en lo relativo a las mesas y sillas como a las sombrillas y elementos adicionales. El modelo será determinado por el Ayuntamiento y los hosteleros tendrán un plazo de tres meses para adecuarse al cumplimiento una vez que entre en vigor la ordenanza.

Entre las novedades, el edil ha asegurado que también en la Rúa, en la plaza de la Libertad, en la calle Meléndez, en la plaza del Peso y en la plaza del Poeta Iglesias, se ganará espacio para los peatones, colocando las sillas en el sentido de la circulación de la calle. Además, para permitir una mejor circulación de peatones se restringirá el número de veladores en varios de los arcos de acceso a la Plaza Mayor y en la Rúa. En esta última se pasará de 48 sillas actuales a 40 por módulo.

Asimismo, se establece un horario para la instalación de las sombrillas en la Rúa, que será desde las 12 a las 16 horas de noviembre a marzo y de 12 a 18 horas de abril a octubre. También se disminuye el número de veladores en la plaza de San Julián y en la calle Obispo Jarrín. En la calle Concejo se limita a una sola fila de veladores para mejorar el tránsito hacia y desde la Plaza Mayor.

Con todas estas modificaciones, Carabias ha asegurado que "se gana espacio para los peatones", sin llegar a "situaciones extremas" como la total eliminación de las terrazas, que ocasionaría un "gravísimo perjuicio" al sector hostelero y a sus proveedores, "pero sobre todo a muchas familias salmantinas en las que alguno de sus miembros se vería abocado a quedarse sin empleo". 

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