Los trabajadores del servicio de atención de llamadas de urgencia a través del número telefónico 1-1-2 de Castilla y León volvieron una vez más a realizar una marcha por las calles de Valladolid con motivo de la huelga indefinida todos los viernes de cada mes para exigir una mejora de las condiciones laborales y salariales.
Sus reivindicaciones pasan por una estructura “seria” y “ordenada” de turnos dotada con un nivel suficiente de personal que garantice una atención adecuada a la ciudadanía, además de un aumento de los sueldos. En este sentido, criticaron que la empresa Ilunion Emergencias ofrece a sus empleados prácticamente en el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y lamentaron que la Junta no prevé su salida del convenio de la venta telefónica, algo que consideraron sería “lo justo”.
La movilización partió de la sede del 112 en el paseo Hospital Militar y llegó a la Plaza Mayor.