El regalo de Reyes de Lorenzo Santolino se demoró un día, pero valió la pena. El 7 de enero, el Coyote de Guijuelo logró su primera victoria en el Rally Dakar tras ser el primero en superar la distancia que separa las localidades sauditas de Bisha y Al Henakiyah. Atrás quedaba el amargo recuerdo del abandono de hace un año como consecuencia de un problema mecánico.
El piloto guijuelense se mostró "súper contento" con su gesta. Su sonrisa se amplió aún más al recibir una felicitación muy especial: la de su hijo Sam. "Muy bien, ¡has ganado!", repetía el pequeño dando saltos en un vídeo que Paco Grande, periodista de RTVE, mostró a Santolino. "Mañana, gas. Te quiero mucho", añadía.
Su orgulloso padre reconoció que echaba mucho de menos a su familia y agradeció su apoyo. "Es duro hacer un año entero esperando a una carrera, sobre todo el año pasado, cuando me tocó irme a casa. Ellos lo sufren cada día, el que no esté". Por ello, no dudó en dedicarle su primera victoria en el Rally Dakar.
Santolino también tuvo muy presente a su madre, fallecida hace unos años tras una enfermedad. "Me he acordado durante la especial. Ha habido un momento que he dudado un poco y he dicho 'ayúdame, ayúdame", reconoció al borde de las lágrimas.
El empuje de su madre se complementó con una "suplementación especial" relacionada con sus raíces charras. "Cuando traigo cosas de Guijuelo y Salamanca siempre funcionan", señaló ante el micrófono de RTVE.
En el top 10
Lorenzo Santolino se mantiene en el top 10 del Rally Dakar a falta de completar la quinta etapa. La cuarta no estuvo exenta de complicaciones, ya que su tablet dejó de funcionar durante horas. "No quería avanzar con la poca información que tenía y perderme. He esperado a Brabec y he ido tirando un rato con él". Pese a las dificultades, acabó en octava posición.
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