Mucho se ha hablado de qué estaba haciendo Kiko Rivera este martes mientras su madre, Isabel Pantoja, prestaba declaración ante al juez, acusada de un presunto delito de insolvencia punible por el que podría ser condenada a tres años de prisión. Destrozada, la tonadillera no podía evitar romperse durante su comparecencia judicial, protagonizando unas desgarradoras imágenes que reflejan el delicado momento anímico que está atravesando la viuda de Paquirri.
Además, sus imágenes llegando a los Juzgados de Málaga rodeada de una nube de periodistas que no la dejaban avanzar han creado una gran controversia, ya que son muchos - entre ellos Anabel e Isa Pantoja, Ana Obregón o Luis Rollán - los que denuncian el trato injusto que ha sufrido la artista, sin ningún tipo de seguridad ni privacidad en su declaración judicial, a diferencia de otros rostros conocidos como María José Campanario, la Infanta Cristina, Iñaki Urdangarín o José Ortega Cano, a los que la prensa no pudieron acercarse en sus respectivos juicios.
Ajeno a esta 'pesadilla' vivida por Isabel Pantoja, Kiko Rivera decidía aprovechar el día para declarar su amor incondicional por Irene Rosales, cargando contra aquellos que se empeñan en destruir su matrimonio. Una publicación muy cuestionada, ya que nadie entendió que el Dj ignorase así a su madre, aunque no tengan relación, en un día tan duro para ella.
Consciente de las críticas que ha recibido en las últimas horas, Kiko ha desvelado a través de una historia publicada en sus redes sociales, cómo vivió la declaración judicial de la tonadillera, confesando que "fue un día complicado".
"Soy humano, tengo corazón y no fue un momento precisamente bonito" ha explicado, asegurando que a pesar de que "en caliente y enfadados podemos llegar a decir cosas que realmente no sentimos", espera "de corazón" que a su madre "no le suceda nada mano". Eso sí, en clara referencia a su tío Agustín Pantoja, Kiko cree que "ya es hora de que mi madre se ponga en manos de gente que la pueda ayudar y aunque le duela, separarse de quien no le hace bien".
"La mejor defensa no es atacar y alegrarse del mal ajeno, se puede volver en tu contra, eso deberían de aprenderlo algunos" ha añadido, en lo que interpretamos ha sido un dardo a su hermano Francisco Rivera por su demoledor ataque contra Isabel, asegurando que a la gente mala solo le pasa cosas malas y admitiendo que en cierto modo es agradable ver a la viuda de su padre en esta situación.
"Si te equivocas pagas y eso es algo que por suerte o por desgracia para otros es así" ha concluido su mensaje a corazón abierto, asegurando que aunque "ya no formo parte de esa familia, eso no quita que ayer fuese un día de mierda". "Recuerden siempre, soy humano y aunque no quiera saber nada de esto no deja de ser mi madre" ha confesado, dejando entrever que está destrozado después de ver a la artista de nuevo en los juzgados.