Dado que el Consistorio es acreedor preferente y el edificio bien de interés cultural, y con las prerrogativas que la legislación de patrimonio establece sobre el derecho de tanteo y retracto de la Administración pública, así como la determinación de la prioridad de destinar a uso público los edificios declarados bienes de interés cultural, creen que sería “altamente positivo” la adquisición pública del inmueble, que ha salido a subasta por 370.000 euros.
Según Trato, sería “un primer paso para lograr la óptima regeneración urbana de la zona”. Por eso han registrado en el Consistorio para solicitar la convocatoria urgente de la Comisión de Servicios a la Ciudad y de la Junta de Gobierno Local para debatir el asunto y participar en la subasta.
La compra del inmueble por el Ayuntamiento serviría “para salvaguardar la defensa de los intereses de la ciudad”, bien mediante la participación en la subasta, o bien instando a la Junta de Castilla y León para que ejercite sus competencias.
También se han dirigido a la Comisión Territorial de Patrimonio Cultural para que “realice las acciones oportunas ante la Agencia Tributaria” para que, de acuerdo a la legislación vigente en materia de Patrimonio Histórico Artístico y Cultural “se garantice la salvaguarda del bien de interés cultural” del convento de Las Gordillas y su entorno.
Según este grupo municipal, el estado de deterioro y ruina de Las Gordillas en pleno centro urbano “supone un impacto muy negativo que hace dudar de la condición de Ávila como Ciudad Patrimonio de la Humanidad, y un gran inconveniente para el trascurso de la vida cotidiana, que pone de manifiesto la extrema necesidad de un plan de actuación municipal para lograr una solución acorde con el interés general de la ciudad”.
Para Trato, “la actual coyuntura urbanística permite entender el conflicto como reto y oportunidad para emprender un camino distinto”.