Las empresas deben jugar un papel decisivo en la lucha contra el cambio climático, pero solo un 29,3 por ciento reconoce adoptar medidas para mitigarlo en 2023, apenas un punto más que en 2022. El preocupante dato aparece recogido en la Encuesta Laboral Anual del Ministerio de Trabajo y Economía Social, donde se precisa que ese porcentaje se eleva hasta el 37,5 por ciento si se trata de implementar medidas de adaptación al cambio climático, con un avance en 4,2 puntos respecto al año anterior.
El estudio recogido por Ical, evidencia en cuanto a las medidas de mitigación, que de las que adoptaron alguna, un 87,2 por ciento adecuó la iluminación a sistemas más eficientes; un 75,3 por ciento hizo seguimiento del gasto energético; un 69,8 por ciento adquirió productos de mayor eficiencia energética; un 68,2 por ciento implementó una programación del sistema de climatización y mantenimiento; y un 62,1 por ciento instaló teporizadores y termostatos programables.
Además, cabe destacar que el 36,6 por ciento instaló paneles fotovoltaicos; un 26,2 por ciento fomentó el uso del transporte colectivo; y solo un tres por ciento afirmó usar energía eólica.
Por lo que se refiere a las medidas de adaptación, la encuesta precisa que un 66,4 por ciento acometió una modificación de la infraestructura de la empresa para hacerla más segura y sostenible; y un 58,8 por ciento promocionó medidas de flexibilización de horarios para reducir el efecto del cambio climático en los trabajadores.
Asimismo, un 38,6 por ciento gestionó iniciativas de prevención y desarrollo de protocolos de actuación para situaciones de emergencia climática; y un 18,9 por ciento, impulsó iniciativas ‘verdes’.
El informe también revela que el 23,7 por ciento de las empresas realizó campañas de concienciación sobre el cambio climático; y un 22,9 por ciento reconoció que aumentaría sus actuaciones en la materia si el Estado cubriera total o parcialmente el coste de estas medidas.
Necesidades de mano de obra y flexibilidad
La Encuesta Laboral Anual también se detiene en otros aspectos como las empresas que necesitaron cubrir algún puesto, que ascendieron al 65,4 por ciento, y los medios que utilizaron para su búsqueda. En concreto, el 70,3 por ciento recurrió al contactos personales; un 9,5 por ciento a redes personales; y un 4,6 por ciento a empresas especializadas en selección y ETT. Además, solo un 2,6 por ciento utilizó portales web de empleo privados; y un 2,3 por ciento, de servicios públicos; un 1,8 por ciento colegios profesionales y asociaciones empresariales, y un 0,7 por ciento, la oficina física de los SEPE.
En este contexto, el documento pone de relieve que del total de empresas que necesitaron cubrir algún puesto el año pasado, un 60,7 por ciento, sufrió dificultades, frente a una media nacional del 50,3 por ciento, informa Ical
El análisis también analiza las empresas que adoptaron medidas de flexibilidad, que ascendieron al 55,3 por ciento, de las que el 15,6 por ciento apostó por medidas internas y otras, 12,4 por ciento, internas solo; y 27,3 por ciento, otras solamente.
En concreto, analizando las otras medidas, las aplicaron un 42,9 por ciento: un 25,1 por ciento, despidos; un 15,7 por ciento, reducción de costes no laborales (excepto inversiones); un 13 por ciento, recorte de inversiones; y un 11,3 por ciento, bajada de trabajadores temporales.
Por lo que se refiere a las internas, y el 20,6 por ciento actuó sobre la jornada de sus trabajadores, ampliando, reduciendo o suspendiendo; un 13,4 por ciento introdujo cambios en el contrato según tipo de jornada; el 2,9 por ciento tocó el sistema de remuneración y cuantía salarial; un 2,1 por ciento apostó por la movilidad funcional y un 1,9 por ciento por la geográfica.
Teletrabajo y formación
La Encuesta Laboral Anual ofrece datos también sobre la aplicación de la modalidad de teletrabajo, y revela que en Castilla y León, la aplicaron el 7,1 por ciento del total de las empresas. La información se detiene en el porcentaje de trabajadores de esas actividades que se acogieron al teletrabajo y afirma que en un 81,6 por ciento de las empresas se situó entre el cero y el 25 por ciento de la plantilla; en un siete por ciento, entre más del 50 y el 75 por ciento; en un 5,5 por ciento, entre más del 25 y hasta el 50 por ciento; en un 5,4 por ciento entre más de 75 y el 100 por ciento; y solo en un 0,4 por ciento trabajó así toda la plantilla.
En cuanto al porcentaje de la jornada de trabajo realizada en teletrabajo, en un 79 por ciento de las empresas en las que se implantó, alcanzó entre el cero y el 20 por ciento; en un diez por ciento, entre más del 40 y el 60 por ciento; en un 8,9 por ciento, entre más del 20 y hasta el 40 por ciento; en un 1,2 por ciento, entre más del 80 y hasta el 100 por ciento; en un 0,98 por ciento, el 100 por ciento, y en un 0,1 por ciento, entre más del 60 y hasta el 80 por ciento.
Por último, en relación a la formación, el 74,9 por ciento de las empresas afirmó proporcionarla a sus empleados. En concreto, un 54 por ciento ofreció cursos y otros tipos de formación, un 29,6 por ciento, solo cursos, y un 16,4 por ciento, otro tipo.
El 53,7 por ciento de las que ofrecieron formación, contrataron cursos diseñados y gestionados por otra organización; y un 23,8 por ciento, definidos por la propia empresa. Un 42,7 por ciento ofreció formación planificada en el puesto laboral, utilizando los medios habituales de trabajo; un 20,3 por ciento, aprendizaje a partir de rotación de puestos o intercambios; y un 20,7 por ciento, participación en conferencias, seminarios, grupos, talleres o ferias de muestras.
Con todo, solo el 27,9 por ciento detectó las necesidades formativas de su personal, de las que el 90,8 por ciento proporcionó cursos. El 72,1 por ciento no detectó las necesidades formativas de sus trabajadores, pero de estas el 68,7 por ciento proporcionó también formación.
La encuesta precisa el porcentaje de trabajadores que aceptaron formarse por sus empresas en periodos de suspensión de contrato o reducción de jornada, y pone de manifiesto que la inmensa mayoría, el 91,2 por ciento, no lo hizo. Para finalizar, cabe destacar que un 70,6 por ciento de las empresas, ofreció formación a sus empleados en materia de seguridad, salud e higiene en el trabajo.