La consejera de Educación, Rocío Lucas, aprovechó este mércoles en Valladolid la clausura del III Congreso Nacional de Educación de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (Csif) para asegurar que la Junta de Castilla y León trabajará para mejorar las condiciones laborales de los docentes, “en la medida de sus posibilidades”. De ahí que tendiera la mano a las organizaciones sindicales al considerar que todos comparten el mismo objetivo de que la educación siga avanzando y mejorando cada día. “Juntos será más fácil de conseguir y podremos afrontar con mayores posibilidades de éxito los retos que se presentan”, destacó.
Lucas apostó, según recogió la Agencia Ical, por dotar a los docentes de los recursos necesarios para desarrollar su labor y que lo hagan en las mejores condiciones posibles, ya que redundará en la calidad de la educación. En este sentido, mencionó el logro importante con la firma del acuerdo entre Junta y sindicatos en enero de 2022 para la mejora de las condiciones laborales del personal docente en los centros públicos. Algo que supuso la bajada de la ratio de los alumnos, el aumento de las plantillas y la reducción del horario lectivo. “Cada vez es mayor la diversidad del alumnado y los docentes tienen que realizar un mayor esfuerzo para atender la pluralidad de las necesidades que presentan y garantizar los altos estándares a los que aspiramos”, expuso. Valoró que este curso se ha implantado la negociación de las 35 horas en el ámbito educativo.
Reconoció que la implantación de cualquier mejora en el ámbito educativo supone un esfuerzo presupuestario pero mostró su convencimiento de que “invertir en educación es invertir en futuro”. Y consideró que los docentes son la “pieza clave” del éxito educativo que disfruta Castilla y León.
En presencia del reelegido presidente nacional del sector de Educación de Csif, Mario Gutiérrez, la consejera reconoció que es un momento clave para la reflexión, plantear el marco académico deseado para el futuro y hacer realidad un proyecto educativo global “más eficaz”. En este sentido, consideró que será “determinante” ser capaces de participar y colaborar en proyectos estratégicos de innovación social, científica, tecnológica, informática y de investigación así como explorar nuevos territorios y debatir ideas para encontrar soluciones a los problemas “más apremiantes”.
Rocío Lucas destacó que la Junta tiene “muy claro” que la educación es el fundamento básico para la construcción de la sociedad. No en vano, precisó que es uno de los factores que más influye en el avance y el progreso de las personas y las sociedades, además de proveer conocimientos, enriquecer la cultura, el espíritu y los valores. “Es necesaria en todos los sentidos y por eso, en Castilla y León, la educación es lo primero”, sentenció, tras añadir que es algo que comparten todas las administraciones, docentes, alumnos, familias, sindicatos y organizaciones empresariales. “Solo así se explica el éxito logrado por el sistema educativo de la Comunidad, que se ha convertido en una referencia a nivel nacional e internacional”, declaró.
La consejera reiteró que la educación es la mejor inversión que pueden hacer las administraciones para construir sociedades “equitativas”, “saludables” y “prósperas”. Por eso hay que avanzar constantemente y Castilla y León ha sido pionera en la universalización del primer ciclo de la Educación Infantil.
También hizo referencia a la educación universitaria, de la que destacó es “fundamental” para la política de generación, retención y atracción y el avance de la investigación. “Nuestros esfuerzos por la defensa de un sistema universitario potente y de calidad son patentes”, declaró. Y citó la mejora de ofertas, la bajada de ratios y los precios públicos, la apuesta por el rejuvenecimiento delas plantillas y la apuesta por el personal investigador.
Por su parte, la secretaria general técnica del Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes, Laura Manzano, apostó por mejorar el atractivo de la profesión docente, su reconocimiento y su prestigio social, además de su competencia. De esta manera, podrá dar respuesta a los “complejos” desafíos que plantea la educación en la actualidad y de cara al futuro.
También incidió, según Ical, en que la educación es la mayor riqueza y el principal recurso de un país, al depender de ello el bienestar individual y colectivo. De ahí que todos los estados hayan prestado consideración a mejorar su sistema de educación y adaptarlo a las circunstancias cambiantes.
Manzano aseguró que uno de los pilares del sistema educativo, junto al alumnado y la comunidad educativa, es contar con un profesorado adecuado. “En España, tenemos la suerte de contar con docentes realmente comprometidos con su misión, al ser los constructores de futuro”, manifestó. De ahí que defendió que cuenten con las “mejores” herramientas y condiciones de trabajo y de formación. Por eso, citó la definición de los hitos de un modelo de carrera profesional docente que recompense los méritos en el desempeño del trabajo e incentive la formación permanente, que se traduce en las reuniones retomadas con los sindicatos.
Mario Gutiérrez, reelegido
El reelegido presidente nacional del sector de Educación en Csif, después de que su candidatura fuera respaldada por el 98,1 por ciento de los votos, huyó de los aplausos y las medallas a los profesores al exigir una mejora de las condiciones laborales, contar con un estatuto docente para dignificar su función y estabilizar sus condiciones, más allá de los “vaivenes” políticos y económicos.
No en vano, Mario Gutiérrez lamentó que la situación de la educación es “preocupante” y las comunidades autónomas revierten los refuerzos implantados durante la pandemia, tras denunciar que hay un déficit de plantilla 43.700 docentes desde 2010 y la tasa de interinidad se mantiene en el 25 por ciento. También, criticó el que el Gobierno incumple el compromiso de refuerzo en matemáticas y comprensión lectora por la ausencia de Presupuestos y abandona la negociación del Estatuto Docente.
Pese a reconocer los buenos datos de Castilla y León, aseguró que los datos e índices de calidad del sistema educativo de España demuestran la mala preparación del alumnado y la poca capacidad de mejora de la educación pública.
Por último, cargó contra la aprobación de una nueva ley de Universidades sin ninguna financiación, con universidades infrafinanciadas y una precariedad “absolutamente injustificada” para un profesorado que debería ser la élite del país.