El Consejo de Colegios Veterinarios de Castilla y León ha pedido a Gobierno y Junta de Castilla y León que faciliten, con el debido control y regulación, el ejercicio de su actividad a los esquiladores de ovejas que residen en nuestro país, así como el acceso de los esquiladores que vienen cada año de fuera de España.
Tal y como recuerda el Consejo autonómico, la primavera es el momento en el que las ovejas precisan, con el cambio de estación, del natural esquileo para prevenir dermatitis y graves zoonosis como sarna, pulicosis y dermatofitosis, entre otras. Por ello, y para procurar el necesario bienestar animal y mantenerlo sano, es necesario librar al ganado ovino de la lana que le ha protegido de las bajas temperaturas invernales, que llega a alcanzar hasta 5 kilos en los machos y 3 en las hembras.
“Es por esto que el esquileo es una práctica imprescindible desde el punto de vista del bienestar animal, la sanidad animal y la salud pública y por lo tanto se convierte en una labor absolutamente esencial”, recuerda el presidente del Consejo de Colegios de Veterinarios de Castilla y León, Luciano Díez.
Díez advierte que “la coincidencia de esta necesidad con la grave pandemia que ha provocado el COVID-19 y la interpretación de las restricciones laborales impuestas, ha provocado que se haya puesto en conocimiento del Consejo de Colegios de Veterinarios de Castilla y León que se está dificultando a veces esta actividad, denegando el acceso de esquiladores profesionales, de los pocos que hay aquí, a explotaciones ganaderas de ovino, por no considerar esta actividad como esencial. Además, las medidas tomadas por la pandemia, como el cierre de fronteras, impiden la entrada de los esquiladores que todos los años vienen a esta Comunidad desde otros países”.
Este hecho, recuerda el presidente del Consejo autonómico, obliga a reclamar que esta atención sanitaria sea permitida, siempre que se observen las especiales medidas anti-contagio entre personas, recomendando que se practique de forma más escalonada y sin aglomeración de individuos, como exigen las condiciones especiales dentro del estado de alarma decretado.
“Aunque la actividad no viene específicamente recogida como esencial en el R.D. 463/2020, ni en las relacionadas en el RDL 10/2020, no quita que sea una más de las actividades normales de manejo necesarias en el ámbito de la producción primaria del ganado ovino. Por lo tanto estaría incluida en el mantenimiento esencial de la producción primaria y no se le deben poner más trabas que las de guardar las debidas precauciones anti-contagio, como ya relacionamos anteriormente”, señala Luciano Díez.
El presidente del Consejo autonómico de Veterinarios explica al respecto que “por si hay dudas de interpretación, pedimos a nuestros responsables autonómicos, que ya habrán considerado la necesidad de esta práctica esencial para la producción ganadera y sanidad animal, que comuniquen las aclaraciones necesarias para que se pueda realizar el esquileo, con las debidas precauciones y soliciten al Gobierno que, con el debido control y regulación, facilite al acceso de los esquiladores a España”.