El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, Luis Planas, ha anunciado este viernes en Salamaq la convocatoria de una reunión, en las próximas dos semanas, con las comunidades autónomas, las organizaciones agrarias y el sector ganadero para avanzar en el seguimiento y control de las enfermedades animales, en coordinación con la Unión Europea y la Organización Internacional de Sanidad Animal. El ministro ha señalado que ante la aparición de enfermedades que afectan a la cabaña ganadera, “resulta necesario coordinar y unir esfuerzos entre las administraciones públicas y el sector para responder a estas situaciones”
Luis Planas ha asegurado que Salamaq es un referente comercial y una magnífica exhibición de la importancia del sector ganadero en España; estratégico para la economía española y clave para el desarrollo del medio rural. En su intervención, el ministro ha tenido palabras de reconocimiento para los profesionales veterinarios por su esfuerzo en mantener “uno de los estándares sanitarios más altos de la Unión Europea y del mundo” y poder conservar abiertos los mercados de exportación. Ha remarcado que, gracias a ese elevado estatus, el sector ganadero español y sus productos cárnicos gozan de gran prestigio y reconocimiento internacional. El ministro considera que mantener unos altos estándares de sanidad animal resulta imprescindible para avanzar en la competitividad y sostenibilidad del sistema alimentario.
Ha asegurado que el sector ganadero español es estratégico para el desarrollo de los territorios rurales, donde conviven una rica variedad de razas ganaderas y de modelos de producción. En 2022, este sector aportó un 40 % a la producción final agraria, con un valor de unos 25.500 millones de euros, “una cifra récord, fruto del buen trabajo del conjunto del sector”. España es el primer productor europeo de carne de ovino, el segundo de porcino y de carne de ave y el cuarto de carne de bovino.
España también ha logrado exportar por valor de 9.700 millones de euros, tanto de animales vivos como de carne y productos derivados de la ganadería, lo que supone “un motivo de orgullo y reconocimiento para nuestros ganaderos, que hacen un excelente trabajo en circunstancias que no son fáciles”. En este contexto, la ganadería tiene una gran relevancia social y económica en Castilla y León, donde predominan los sistemas extensivos bajo modelos de explotación familiar. Esta comunidad autónoma, que aporta al total nacional el 15 % de la producción animal, alberga el 28 % del censo de vacas nodrizas, el 16 % del censo de ovino, el 13 % del censo de porcino y el 12 % de vacas de leche.
Por otra parte, el ministro ha recalcado que el Gobierno apoya de manera decidida al sector agrario ante el reto de lograr sistemas alimentarios sostenibles y rentables, que garanticen la seguridad alimentaria. En el marco de la Política Agraria Común (PAC), Planas ha precisado que el Plan Estratégico diseñado para su aplicación en España va a beneficiar a 622.404 agricultores y ganaderos, que este año van a recibir 4.875 millones de euros (más de 3.500 millones van a ser desembolsados a partir del próximo 16 de octubre) “un honesto complemento a la dificultad que supone obtener una renta digna en las explotaciones agrarias de nuestro país”.
Ha valorado la gran acogida que han tenido los ecorregímenes en el conjunto de España, ya que 3 de cada 4 declarantes se han acogido a estas prácticas, con un total del 87 % de la superficie nacional declarada. En este ámbito, Castilla y León ha sido la primera comunidad autónoma en la declaración de los ecorregímenes, ya que se ha solicitado esta ayuda para 4,7 millones de hectáreas, lo que supone un 96 % de la superficie susceptible de recibir estas ayudas, el porcentaje más elevado de toda España. “Esto demuestra la implicación de los agricultores y ganaderos de Castilla y León, no solo con su trabajo cotidiano, sino en el cumplimiento de los objetivos estratégicos de la producción de alimentos”, ha destacado.
Asimismo, Planas ha asegurado que los 713 millones de euros que el Gobierno ha destinado a apoyar al sector agrícola y ganadero para paliar los efectos de la sequía comenzarán a desembolsarse el próximo mes de octubre. Además, a apuntado que, a fecha 30 de julio, se han peritado y abonado 907 millones de euros en indemnizaciones por parte de Agroseguro, “una cifra muy superior a la liquidación final del año pasado, que fue de 813 millones de euros”.
Planas ha insistido en la necesidad de que “el Gobierno de España y el conjunto de las comunidades autónomas unamos esfuerzos para afrontar cada una de las dificultades, tanto en beneficio del propio sector agrario como del conjunto de los ciudadanos”.