El malestar de los ganaderos va aumentando cada día. A la inestabilidad actual que vive el sector con la vacuna de la lengua azul, los saneamientos y los casos de animales afectados por la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE), se le suman las pérdidas económicas, y ahora la mala gestión existente en la recogida de los animales muertos.
Desde las organizaciones ganaderas denuncian el mal funcionamiento de Agroseguro. En concreto, el presidente de ASAJA Salamanca, Juan Luis Delgado, declara a SALAMANCA24HORAS que “por nuestra parte queremos denunciar el mal funcionamiento que está teniendo Agroseguro. Me consta que muchos ganaderos se están viendo afectados por la tardanza en la recogida de los animales muertos”. Y añade que “en caso de que un animal se muera el viernes hay que esperar al lunes, porque el sábado no lo recogen, cuando en verano sí debería de ser así, y eso solo provoca que se les vaya acumulando el trabajo y haya retrasos en la recogida”.
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) reconoce que “hemos denunciado a través de un comunicado hace un mes este problema. Se lo hemos hecho llegar al jefe del Servicio Territorial de Agricultura y Ganadería de la Junta en Salamanca, Javier García y nos ha hecho caso omiso. Y por eso le hemos mandado una carta a la directora General de Producción Agropecuaria de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Teresa Rodríguez Vidal”.
Igualmente, Carlos José Sánchez, secretario general de UPA asegura que “siempre que llegan las vacaciones, bien sea verano, Semana Santa o las navidades estamos con el mismo problema de que no se recogen los cadáveres. Hay animales que tienen que estar hasta 7 días muertos, tapados con una lona para evitar que los buitres se los coman. De hecho, hace 15 días denunciamos un caso de una oveja en Vitigudino que estuvo 7 días esperando al camión de la recogida”.
Es por ello por lo que sentencia que “a quien hay que sancionar es a la empresa de cadáveres porque no está cumpliendo con sus obligaciones, no cubre las bajas, ni las vacaciones del personal”. Una declaración referente a que, según ha podido saber SALAMANCA24HORAS, y respalda UPA, la Guardia Civil ha llamado la atención a algún ganadero por tener animales muertos en la explotación varios días. A lo que Carlos José Sánchez responde que “los ganaderos estamos indefensos. Somos las víctimas”.
Ramón Guarido, presidente de la Asociación ’19 de abril’ se suma, también, a las quejas, y advierte de que, aunque “en verano como están de vacaciones tardan más en la recogida, no se puede permitir, porque huele muy mal, y porque a nadie le gusta tener cadáveres descompuestos que podrían desarrollar otras enfermedades”.
En este aspecto, Juan Luis Delgado subraya, incluso, que tras el aumento de los casos de la EHE es “peligroso” que los cadáveres permanezcan muchos días en una explotación: “Los animales se mueren es por algo, y cuanto más tiempo esté el animal muerto, más riesgo hay de que el mosquito propague la enfermedad si pica a ese animal infectado”.
Asimismo, y tras la reunión que hace una semana mantuvieron las organizaciones ganaderas con la Junta, solicitando información sobre la EHE, el presidente de ASAJA expone que “la información que nos dieron no fue suficiente. Nosotros pedimos información puntual, que se haga un seguimiento, y que los veterinarios certifiquen los casos tratados y las muertes con los costes, para de alguna manera tener un justificante si la Administración se hiciera responsable”.
Este pasado jueves, 24 de agosto, este medio se hizo eco de las quejas de los ganaderos por el tratamiento que está teniendo la EHE por parte de la Junta de Castilla y León y el Ministerio de Agricultura y Ganadería, donde a juicio de los propios afectados, los ganaderos, en Salamanca “son más las bajas que los casos declarados de la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica”. Mientras que lamentan que “la Administración está haciendo la vista gorda, ocultando la realidad y tapando los animales que hay afectados”.
También este miércoles por la tarde, 'Ganaderos Unidos CyL' emitieron un comunicado con un protocolo de tratamiento para los bovinos, aplicado por veterinarios en algunas zonas afectadas con anterioridad a Castilla y León, como es el caso de Extremadura. El comunicado es el siguiente: